domingo, 26 de agosto de 2007

Recopilación de poemas



Queridos amig@s, Internet nos está ofreciendo algo maravilloso que nosotros nos negamos en dejar pasar como si nada. Cada día leemos poemas de personas que quizá no tienen libros, no son conocidas como poetas o simplemente utilizan la escritura como desahogo. Por ese motivo, vamos a intentar rescatar de los foros, así como del canal de chat en el que solemos encontrarnos, algun que otro poema de esos amigos que cada día nos regalan maravillosos poemas. Naturalmente, no podemos recogerlos todos, pero intentarmos que todo el que deje un poema pueda aparecer en este blog. Los poemas no se pondrán sin consuk


Este poema pertenece a Galilea y apareció en el foro poesía_ amistad. Es un poema muy especial, tuvo mucho tiempo de cosecha y nos ha parecido una de las mejores formas de comenzar esta recopilación de poemas.


MEIN HERZ BRENNT
(Mi corazón arde)



Para Javier H. G.,
quien se atrevió a irrumpir
en los viejos lugares de mi olvido.





I

Se ha producido el enfrentamiento
en el territorio del silencio,
donde tú jamás has vuelto.

Mein herz brennt,*
y el costado no se apacigua.

Mein herz brennt,
y la herida se infinita.

Mein herz brennt,
y aún existe la pregunta prohibida.




II

Luchan mi juicio austero
y tu conciencia inhumana,
sin más campo de batalla
que el hueco
que ocupó tu recuerdo.


Y la visión es tan amplia,
que ahora comprendo todos los ejes,
todas las esferas,
todos los espacios.





III

Mein herz brennt,
tú aún dominas el tiempo.

Mein herz brennt,
yo poseo la estancia.

Se está produciendo un enfrentamiento
donde tú jamás te has ido.



IV

Habitan en mi mismo ser,
dos mujeres vivas:
una,
la Gran Señora, conocedora del placer alto
-tu amante suicida-
otra,
la que traicionará tu memoria
y pondrá fin a un poemario.



V

Vuelve a gemir el firmamento
y se revela la hembra.
porque el filo de tu cuerpo
se ha vuelto hostil
a mi pensamiento unigénito.



VI

Mein herz brennt.
Apártate de mi cama doliente.

Mein herz brennt.
Quiero oír la ruptura de tu costado.



VII

Dieciséis días de guerra
para poner fin a un espacio
y a un tiempo,
ahora gobernado por la madrugada perpetua
y la alienación completa.



VIII

El niño no-hombre,
de nuevo, quiere ser gozado.
¡Oh gran tentadora!
surges poderosa
quebrantando mi morada.


IX

¿Cómo arrancarme una herida
que tanto me place?
¿Cómo dejar de amarte
con ésta llaga celosa?

Mi corazón arde,
y el tuyo se corrompe.


X

La libertaria siente miedo
a ser liberada.

En la pesadilla suprema,
cientos de niños
con sus fusiles se alistan a mi ejército.

La niña soldado, enumera nuestros hijos no nacidos,
y mientras caminamos juntas entre los muertos,
yo sólo mantengo la perpetua
visión de tu cuerpo yacente.


Y Ella ríe gozosa desde lo más alto

Abrázame Torturadora,
porque tengo miedo de la libertad.



XI

Se fragmenta la noche
que ahoga las nuevas caricias
con verbos ya pasados,
mientras
tú y tu Alta Dama
copuláis en mi presencia.



XII

Mein herz brennt.
Mi corazón arde,
y mi carne encelada
se ha cansado de pertenecer a un no-muerto.

¡envíame a tus espectros
para que me bramen y posean!.
Yo les di la vida plena.
-yo les daré el último aliento-.


XIII

La Dueña de todas tus causas,
me hostiga,
ha cubierto mi boca de llagas
para que sangren todos los verbos
hasta ahora no pronunciados.

Al amanecer, rompe los espejos
y quiere arrancarme los ojos,
porque ya no encuentro belleza
al contemplar,
la herida de mi espalda.


XIV

En el decimoctavo día
aparece ella, lujuriosa
susurrando placeres y alcobas.

Vano tu esfuerzo, y equivocado,
no me complacen ya
los juegos imperfectos
ni quiero seguir custodiando
tu almohada.

Porque para caliente:
ya está mi ira.


XV

Negra.
La puerta de tu alma
es negra.
*

Décimo noveno día.
Tan agónico como todos
los décimos,
como todos los novenos
como todos los días.

De no ser porque me llegan palabras nuevas,
y porque el viento ha cobrado distinta forma,
hoy hubiera llamado a tu puerta.

Tu puerta negra.



XVI

Tremendísima cuarentena
que me roba los poemas venideros
y enmudece la nueva boca
con las cenizas de la que fue
mi consagración.

Hoy,
he perturbado la materia
he rotado sobre mí misma
en la danza amante
y alterando los ejes,
se ha producido la gran visión:
un horizonte púrpura brillante
creado únicamente para mi gozo.

Me placen y complazco.


XVII

“Éste es el que lucha contigo y por ti
todos los días,
el que places y te complace”.


Han crecido rosas blancas
en el paraje de mi exilio.

Me templo.

Ya se ausenta la llaga,
-un pequeño instante perfecto-
en un lugar nuevo
donde cabe el sosiego
y se han consumado la espada y la herida.

Mi corazón arde.
Mein herz brennt.

Hoy, me están amando.



galilea
13/07/07





3 comentarios:

Bertix dijo...

Galilea, y todavía dudas en presentarte o no????

Anónimo dijo...

jeje... bahhia, no seas malosa...

ejco, muchas gracias por abrir este nuevo espacio con un poema de los mios. Es un honor :)

Además, lleva una carga de sentimientos tremenda. Es un poema muy especial para mí.

Y llevas razón, muchas veces, en el canal, se recitan poemas estupendos y no deben de perderse por ese ciberespacio... aunque hay quien dice que los poemas vuelan y siempre llegan donde tienen que llegar... quién sabe...

Gracias de nuevo guapa.

¡besos!

-galilea-

Anónimo dijo...

Bueno que decir, tus poemas son EXCELENTES, EXCELENTES,de una presencia y una fuerza Única.

Increible ese poema!

RENATA.